Extrusión y laminación
En este proceso se emplea la extrusora, que se alimenta con materia prima nueva y de reciclaje (en nuestro caso poliestireno y polipropileno) y la impulsa con un tornillo sin fin en una cámara rodeada de resistencias eléctricas para calentar hasta una temperatura específica.
Este material fundido se extruye por un cabezal plano y pasa luego una serie de rodillos de laminación para lograr especificaciones precisas de ancho y espesor. Según el tipo de máquina, este material entra caliente directamente en la termoformadora o se enfría y se embobina para su posterior uso.
Termoformado
Se inicia en la sección de alimentación de la máquina termoformadora que recibe el material laminado y lo calienta para fundirlo y darle la fluidez apropiada. Al llegar a la zona de los moldes, la lámina caliente se empuja en las cavidades con aire comprimido, dándole forma y cortando el borde de cada pieza.
El producto final se apila y se empaca, mientras que el sobrante de la lámina se reutiliza, moliéndolo e incorporándolo como material de reciclaje en un nuevo proceso de laminación